Desde el pasado 1 de marzo, soy el portavoz del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Alcobendas. Para mí significa una gran responsabilidad y un reto importante pero, sobre todo, asumir un compromiso con la ciudadanía.
Un compromiso de trabajo para situar de nuevo a Alcobendas en el tren de alta velocidad donde los Socialistas la colocamos, siempre en vanguardia, avanzando con paso firme y con un proyecto de ciudad del que todos y todas nos sentíamos orgullosos.
Desde el Gobierno municipal, éramos conscientes de que la ciudadanía estaba dispuesta a aportar su grano de arena y nosotros teníamos la obligación de buscar el camino para que la suma de sus esfuerzo fuese más que el total de sus individualidades.
Sin embargo, ahora tenemos un alcalde que no gobierna, no lidera y al que no le importan los problemas de sus vecinos ¿Qué solución ha dado a los miles de jóvenes que no pueden acceder a las viviendas de VPO que les tocaron y que ahora no obtienen crédito de los bancos? NINGUNA.
¿Y a las 50 familias que accedieron a las viviendas de permuta y que tienen que rehusar a ellas por sus dificultades sociales y sus problemas médicos? NINGUNA.
¿Y a los problemas que sufrieron miles de alcobendenses durante dos, tres y cuatro días después de la nevada? NINGUNA.
¿Y la respuesta a los trabajadores del Ayuntamiento, Patronatos y a la Policía Local en espera de un convenio justo? NINGUNA.
El Partido Popular no da respuestas a los problemas de sus ciudadanos porque no tienen ilusión con un proyecto de futuro.
Por eso, mi compromiso como portavoz es realizar una oposición seria y contundente, con propuestas, a la altura de las circunstancias y de los votos conseguidos -el Partido Socialista ganó en tres de los cuatro barrios de nuestra ciudad.