Este diario ha llegado al final. Han sido dieciocho intensos días de trabajo, ilusión, encuentro con los vecinos, sensaciones, inquietudes, alegrías y muchas otras cosas que hemos compartido en esta campaña electoral.
Ayer tuvimos el mitin de cierre. No había parrillada ni ágape, pero los vecinos llenaron a rebosar el Centro Cultural Pablo Iglesias, nos escucharon y nos ofrecieron su apoyo.
Antonio Miguel Carmona, candidato del PSM a la Asamblea de Madrid, abrió el acto y nos recordó que el próximo domingo nos enfrentamos a la injuria, la calumnia y la mentira del gobierno de Esperanza Aguirre, alejado del resto de los partidos conservadores europeos.
Yo quise hacer un repaso de las mentiras del alcalde, Ignacio García de Vinuesa. Mintió al prometer 6.000 viviendas y ha hecho 92. Mintió al ofrecer empleo y ha paralizado el polígono Valdelacasa. Mintió al defender la calidad de vida de los vecinos y ha consentido a Esperanza Aguirre vaciar el Centro de Especialidades Blas de Otero.
También les recordé las ocurrencias del alcalde en seguridad ciudadana. Al principio de su mandato montó a la policía a caballo, luego la subió a los subway y ahora se gasta el dinero de los vecinos en una flotilla de bicicletas con motor. Entretanto, la quita de las calles y pone en riesgo la seguridad de los vecinos.
Pero, frente a los incumplimientos y la arbitrariedad del Partido Popular, yo me he comprometido a poner en marcha un Plan de Empleo público con el consenso de empresarios y sindicatos y una aportación de 2 millones de euros del presupuesto municipal. A exigir al próximo presidente de la Comunidad de Madrid, que será Tomás Gómez, la construcción de un centro de Urgencias para los vecinos de Alcobendas. A devolver a la Policía Local a la calle, con los vecinos. A convertir Alcobendas en una ciudad educadora, referente en nuestro país.
El cierre fue todo un lujo. Con nosotros estaba el ministro de Educación, Ángel Gabilondo. Él, que fue rector de la Universidad Autónoma de Madrid y colaboró con el ayuntamiento socialista en Alcobendas, valoró mi proyecto de gobierno como un proyecto lleno de emoción, convicción y sentido común. Gracias, ministro. Siempre es un placer escuchar sus reflexiones.
En fin. Esto ha sido todo. Es viernes y toca reflexionar. Estoy convencido de que el domingo va a ser un gran día en el que vosotros tendréis mucho que decir. Yo siempre estaré cerca para escucharos. Gracias.